[ NOTA ROJA ]
Vinculan a proceso al padre que mató a su hija de tres meses
Durmió sobre ella
Omealca, Ver. — La sala del juzgado se llenó de silencio. Frente a la evidencia brutal, los argumentos desesperados de la defensa intentaban, inútilmente, suavizar lo imperdonable. Decían que fue un descuido.
Un accidente. Un error. Pero la jueza de control, firme, clara y conmovida por la crueldad de los hechos, fue contundente: “Esto no es omisión. Esto es feminicidio.”
Este sábado, la Fiscalía Especializada en Investigación de Delitos de Violencia Contra la Familia, Mujeres, Niñas y Niños y de Trata de Personas informó la vinculación a proceso de Eduardo “N”, un sujeto originario de la comunidad de La Palma, municipio de Omealca, quien la noche del 18 de abril fue hallado dormido —sin pena ni conciencia— sobre el cadáver de su hija de apenas tres meses de nacida.
La menor murió asfixiada. Aplastada por el cuerpo alcoholizado de su propio padre, que en vez de velar por su vida, la usó como almohada después de una noche de borrachera desenfrenada.
La madre, como cada noche, salió a trabajar para poner comida sobre la mesa. Él, como cada noche, se quedó a cargo de la bebé. Pero esa madrugada decidió embriagarse más de lo habitual, hasta perder el control, hasta convertir el hogar en una tumba.
Personas allegadas a la familia fueron quienes descubrieron la escena: la pequeña inmóvil, su padre encima, dormido, como si nada hubiese pasado. Ellos mismos lo entregaron a la Policía Naval.
La necropsia confirmó lo evidente: la bebé murió por asfixia mecánica, provocada por una presión directa y sostenida sobre su pequeño cuerpo.
Durante la audiencia, la defensa del imputado quiso convencer al juzgado de que no hubo intención, de que fue un accidente.
Pero el asesor jurídico de la madre, el maestro Uriel Moreno Mendoza, rebatió cada palabra.
Aportó pruebas, testimonios, dictámenes médicos, y dejó en claro que no se trató solo de una omisión: se trató de violencia, de negligencia criminal, de una cadena de decisiones que terminaron con la vida de una niña indefensa.
Y fue entonces cuando la jueza, con la ley en una mano y la dignidad de la víctima en la otra, tomó la palabra. Su resolución no titubeó.
Dictó prisión preventiva oficiosa y vinculó a proceso a Eduardo “N” por el delito de feminicidio. La justicia habló con voz firme: la muerte de una niña no puede quedarse en el olvido ni en tecnicismos legales.
Ahora, el presunto feminicida está recluido en el penal de mediana seguridad de La Toma. Mientras tanto, una madre llora, una cuna está vacía, y un pueblo exige que la muerte de esta bebé no sea solo una estadística más.
Porque en Veracruz, la justicia también tiene rostro de mujer. Y esta vez, habló fuerte.
Miguel Ángel Contreras Mauss
Córdoba, Ver. — Un operativo conjunto entre fuerzas federales y estatales permitió la desarticulación de un presunto grupo delictivo que operaba en la unidad habitacional San Román, en Córdoba.
La acción derivó en la detención de seis personas y el aseguramiento de motocicletas, aparatos electrónicos y drogas.
De acuerdo con la Fiscalía Regional de Córdoba, el cateo fue realizado tras una orden judicial y contó con la participación de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), Secretaría de Marina (Semar) y la Secretaría de Seguridad Pública Estatal (SSP).
En el sitio fueron capturados Irving Yair “N”, Alan Said “N”, Adrián Alejandro “N”, Aram Daniel “N”, Ángel David “N” y Verónica Daniela “N”, presuntamente ligados a actividades ilícitas en la zona norte de la ciudad.
Durante la intervención se aseguraron motocicletas, celulares, un lector de tarjetas, empaques para vape, así como una sustancia granulada blanca con características del cristal.
También se localizaron cajas selladas de teléfonos móviles, auriculares, cargadores y sobres de micas para celular, además de hierba seca con apariencia de marihuana.
El operativo transcurrió sin enfrentamientos ni personas lesionadas. Los detenidos fueron puestos a disposición de las autoridades competentes, que determinarán su situación jurídica y el posible vínculo con delitos del fuero común y federal.
Vecinos de la zona señalaron que en los últimos meses habían notado movimientos sospechosos en algunos departamentos del conjunto habitacional.
Con este cateo, las autoridades buscan desarticular células dedicadas a robo y narcomenudeo que han incrementado la percepción de inseguridad en Córdoba.
Por Miguel Ángel Contreras Mauss
Ixhuatlán del Café, Ver. — Dos personas fueron encontradas sin vida en hechos distintos ocurridos este miércoles en los municipios de Ixhuatlán del Café y Córdoba. Las autoridades investigan ambos casos como probables suicidios.
En el primer hecho, una joven identificada como Mitzi Xaco Martínez, de 18 años de edad, fue localizada sin vida en el interior de su vivienda ubicada en la comunidad de Ixcapantla, perteneciente a Ixhuatlán del Café. De acuerdo con versiones de familiares, la joven atravesaba por un cuadro depresivo.
El hallazgo ocurrió durante la tarde, cuando sus parientes regresaron al domicilio y la encontraron inconsciente.
Elementos de Protección Civil municipal acudieron de inmediato al sitio, pero confirmaron que la joven ya no presentaba signos vitales.
Personal de la Fiscalía Regional de Huatusco y del área de Servicios Periciales realizaron las diligencias correspondientes y ordenaron el traslado del cuerpo a una funeraria para practicarle la necropsia de ley.
Horas más tarde, en la ciudad de Córdoba, se reportó un hecho similar en la unidad habitacional Huilango 3000, donde un hombre de aproximadamente 70 años de edad fue encontrado sin vida dentro de su domicilio.
Autoridades locales tomaron conocimiento del caso y realizaron el levantamiento del cuerpo, que fue trasladado al Servicio Médico Forense para determinar las causas del fallecimiento.
En ambos casos, las autoridades exhortaron a la población a buscar apoyo psicológico o emocional ante cualquier situación de crisis, recordando que existen líneas de ayuda disponibles las 24 horas, como el número nacional SAPTEL 800 472 7835, o los servicios locales de atención psicológica en los municipios.
Miguel Ángel Contreras Mauss
Yanga, Ver.– Un adolescente de 15 años, identificado como Jorge Jesús Flores Huerta, fue asesinado y su cuerpo abandonado en el campo deportivo de la comunidad Mesillas.
Según autoridades, la víctima fue interceptada por sujetos armados mientras se dirigía a su domicilio y atacada a tiros.
El municipio de Yanga sigue siendo un foco rojo de violencia en la región centro de Veracruz.
En lo que va de 2025 se han registrado al menos 15 homicidios violentos, incluido el del comandante de la Policía municipal, José Luis García Domínguez, asesinado a balazos el 30 de septiembre dentro del gimnasio Hércules.
Las autoridades locales han intensificado la vigilancia ante la escalada de homicidios, que mantiene en alerta a los habitantes del municipio, quienes exigen medidas más efectivas para garantizar la seguridad.
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